DESCRIPCIÓN
El concepto de Procesión y el de acto litúrgico se entremezclan en una peculiar puesta en escena que se distingue por su solemnidad. Precedido de un grupo de rompimiento formado por tambores sordos, Cruz Guía y Ciriales, desfila el Tercio de nazarenos de la Hermandad de Santa. María Magdalena, portando velas y precediendo al Paso del Stmo. Cristo de la Sangre, acompañado de la multitud, desfila al son de las marchas interpretadas por la Banda de Música. Cuando se alcanza cada uno de los lugares previstos para las estaciones (donde espera la Cruz y los Ciriales alzados), se detiene la música y comienza el rezo de la Estación, finalizado el cual se reanuda el desfile.
PECULIARIDADES, INTERÉS DEL DESFILE Y RECOMENDACIONES
Sin duda la nota de mayor interés de la noche es la posibilidad de disfrutar de la propuesta de dos formas distintas. Este original planteamiento permite, de un lado, unirse desde el comienzo al nutrido grupo de fieles que sigue al Cristo en el rezo completo del Vía Crucis, cuya meditación, preparada por el Párroco cada año, se imprime y distribuye entre el público. De otro, es posible asomarse al magno cortejo en algunos puntos para contemplar la Procesión como tal, que preside la magnificencia del trono, espléndido trabajo en madera realizado por Ibáñez Valles, y sobre todo por una de las obras maestras del imaginero Álvarez Duarte, el Stmo. Cristo de la Sangre (obras ambas realizadas en Sevilla en el año 2001). Por la solemnidad del desfile y las notables dimensiones del Paso, resulta particularmente edificante contemplarlo en la Plaza del Comisario, donde llega al poco de realizar su salida; y también a su recogida, ya de madrugada, cuando la Plaza del Ayuntamiento es testigo del buen hacer de los anderos dando vuelta al trono para su entrada en la Basílica de la Asunción.
ITINERARIO
Plaza Mayor, Cid, La Parra, Rincón de los Pinos, Pinos, Larga, Buitragos, San Sebastián, Esquina del Convento, Mesones, Cadenas, Barco, La Hoz y Plaza Mayor,
HORA
21:30